Conocimos al director Claude Crouzat, que vive en Alicante desde hace más de 25 años.

Entrevista con Claure Crouzat, director de Abrisol

¿Qué es Abrisol hoy?

Se trata de una de las gamas más amplias del mercado: alta, baja, fija telescópica, con paredes de policarbonato o vidrio laminado, tanto para el sector residencial como el colectivo con modelos a medida. También estamos en condiciones de dar respuesta a todas las solicitudes de cubiertas para terrazas, cubiertas fijas, paneles ...

Para desarrollar esta oferta, disponemos de una fábrica de más de 10.000 m² (de los cuales 5.000 m² cubiertos) dedicados a la producción y a la investigación, desarrollo e innovación, empleando a 35 personas con una capacidad de producción de entre 800 y 1.000 cubiertas al año.

¿Está creciendo el negocio?

Sí, especialmente a nivel internacional. Hoy nuestras ventas se distribuyen un 40% en el mercado nacional español y portugués, un 40% en Francia y el 20% restante en parte de Europa (con Italia, Suiza, Hungría, Moldavia, Inglaterra) pero también en Argelia, Túnez, Marruecos, Israel y Rusia.

Sin duda, esta última parte está experimentando un importante crecimiento. La producción destinada a ella es gestionada directamente por importadores (1 por país) que se encargan de la venta, instalación y servicio postventa. Esta organización nos permite enfocarnos exclusivamente en los 2 principales países: España y Francia, con el fin de brindar el mejor servicio.

En España, vendemos directamente a particulares e instalamos directamente nuestras cubiertas con un equipo extremadamente móvil y receptivo. Una forma eficaz de reducir al mínimo los problemas de montaje y servicio posventa.

Vista interior de la fábrica de Abrisol

¿Una palabra sobre la crisis sanitaria?

Estábamos muy asustados a principios de marzo de 2020 ante este desastre totalmente impredecible. Sin embargo, hicimos nuestro trabajo fabricando pantallas protectoras de policarbonato para las administraciones españolas. Esta actividad nos ha permitido almacenar esta materia prima, imprescindible para la fabricación de cubiertas. Y durante el cierre, el efecto de «mejora del hogar» se extendió de manera inesperada. Hoy nos enfrentamos a una demanda que se ha triplicado. Por lo tanto, nuestros tiempos de fabricación se han ampliado de 4/6 semanas a aproximadamente 10 semanas. Sin embargo, logramos superar esta afluencia con buena flexibilidad y la posibilidad de organizar 2 x 8 horas de trabajo por día.

Para mantener el contacto con todos nuestros profesionales, acabamos de poner en marcha talleres de formación a distancia. En forma de videoconferencias, los revendedores pueden asistir a estos talleres, que dirijo yo. En ellas se habla del mercado de cubiertas de piscinas, presentamos la oferta de productos de la marca, segmentos de clientes y acciones comerciales específicas.