Los objetos conectados son ahora una realidad comercial. No hay duda sobre eso. El volumen de negocios realizado con ellos en el sector de la piscina crece muy rápidamente. Por otro lado, las oportunidades de negocio ofrecidas por el "Internet de los objetos" siguen siendo confidenciales.

Sin embargo, las redes de distribución, los fabricantes y también los propietarios de piscinas deberían prestar más atención a este nuevo modo de comunicación. Los más curiosos y emprendedores se llevarán el premio...  como muchas veces.

Buscando siempre nuevas tendencias, EuroSpaPoolNews os ofrece entender mejor esta nueva revolución.

¿Qué es el "Internet de las Cosas" (IoT)?

En materia de objetos conectados, las cifras de los pronosticadores dan vértigo. A finales de 2017, se habrán gastado alrededor de 1.7 trillones de dólares en objetos conectados. Según el mismo estudio del gabinete Gartner, el mundo debería tener más de 12 mil millones de objetos conectados para el año 2018. Otros estudios estiman que para el año 2020 habrá 30 objetos conectados en promedio por hogar.

¿Y conectado a qué entonces?

¡A Internet, por supuesto! Antes de enviar notificaciones a su smartphone, los datos procedentes de los objetos conectados pasan a través de una red de Internet dedicada. Este es el Internet de las cosas o Internet Of Things. ¿Cuáles son los retos del futuro de este Internet de los objetos? Estos miles de millones de datos que circulan, ¿qué oportunidades ofrecen?, ¿y para quién? Algunas pistas de reflexión...

Una revolución para las relaciones con los clientes

Los datos de los objetos conectados pueden ser recogidos por varias partes. Obviamente, en primer lugar, son los propietarios de piscinas o los constructores los que están interesados en estos datos. Los productos ya mencionados como blue, Flipr, ICO... permiten por ejemplo, determinar rápidamente qué productos utilizar para el tratamiento del agua. Pero estos datos también pueden ser recolectados o vendidos directamente a los fabricantes.

Estamos en 2025, el 80% del parque de piscinas en Francia está conectado. ¡Qué gran herramienta para los fabricantes! Pueden utilizar estos datos para gestionar su producción y anticiparse a las necesidades de los distribuidores. Al comparar los datos con los factores meteorológicos, los fabricantes también pueden observar cómo sus productos reaccionan a las condiciones climáticas.

En 2025, también serán capaces de decir cuántas veces y cuándo las piscinas se utilizan de acuerdo a las zonas geográficas o al tipo de piscina. Lo mismo para los spas. ¡Qué inmensa base de datos para la investigación y el desarrollo! Con el Internet de los objetos, no sólo se adivinan los hábitos de consumo de los clientes. Se obtienen, y de manera muy precisa.

IoT crea nuevas necesidades en torno a la piscina

Estamos en 2025, sigamos con nuestro ejercicio de prospectiva. Los objetos conectados se multiplican en la casa y alrededor de la piscina. Aquí algunos ejemplos de oportunidades de negocio.

Energía

Con docenas de objetos conectados en casa, que están continuamente funcionando, la gestión de la energía pronto será un elemento esencial. El fondo valón «The Faktory», que ya había apoyado Riiot Labs y su flotador conectado Blue, no estaba equivocado. El fondo de inversión privado también cree mucho en el futuro de E-Peas. Esta start-up se especializó en la Ultra-Low Power y desarrolla tecnologías que reducen significativamente el consumo de los objetos conectados. Este tipo de servicios sin duda está destinado a desarrollarse en el futuro.

Pedagogía

Si todo el mundo entiende rápidamente el valor de los objetos conectados en la piscina, configurarlos y hacer un uso óptimo de ellos es otra cuestión. El profesional tendrá que convertirse en un «experto digital» para desarrollar su negocio. Poner las cosas en funcionamiento, explicar su funcionamiento y proponer recopilar los datos son servicios que se multiplicarán en las piscinas. Al igual que ayudar al consumidor final a elegir el producto adecuado en la jungla de objetos conectados. El futuro seguramente sonreirá a los profesionales que habrán sabido adaptarse al Internet de los objetos.

Asistencia

Quien dice «conectado», dice «desconectado». Por muchas razones, estos objetos conectados pueden necesitar asistencia. Ya sea por averías, o también por problemas de actualizaciones. Todos los productos conectados tendrán que actualizarse al igual que su (indispensable y muy caro) smartphone. Aunque es probable que muchas actualizaciones sean realizadas de forma remota por el fabricante, otras, a la inversa, requerirán la intervención de un tercero. ¿El constructor por ejemplo?

Seguridad

Por último, la seguridad es un tema importante en el Internet de los objetos. Por ejemplo, el lenguaje de programación Linux, actualmente utilizado para desarrollar objetos conectados, ha sido vulnerable 200 veces en 2016.

Un objeto conectado vulnerable hace que sea muy fácil para un hacker recoger un montón de datos más o menos confidenciales y críticos. Una rigurosa instalación de estos objetos y una cuidadosa configuración de su conexión deberían reducir estos riesgos. Una vez más, un profesional a menudo tendrá que hacerlo.